El legado de Antonio Gramsci es inmensurable. Ampliamente reconocido como el principal teórico político marxista, su obra ha sido utilizada desde los más diversos ángulos ideológicos y enfoques teóricos para analizar los procesos políticos y las estructuras institucionales de las sociedades capitalistas. Menos frecuente es, no obstante, su uso como referencia central para la definición de los marcos conceptuales sobre los que se construyen las líneas maestras de proyectos políticos de carácter emancipatorio, a pesar de que nadie como el pensador y político italiano se ha aproximado tanto a la elaboración de una teoría política completa y con potencial para constituirse en alternativa integral al modelo político liberal.

Esta obra asume el enorme reto que supone profundizar en el vínculo existente entre el pensamiento político de Gramsci y el concepto de democracia participativa como alternativa a la democracia liberal. Transcurridos varios lustros desde que en un significativo número de países comenzasen a desarrollarse procesos políticos de diversa índole que han sido relacionados, en mayor o menor medida, con la idea de profundizar en la democracia e impulsar esquemas diversos de gobernanza participativa, resulta particularmente oportuno volver una vez más a Gramsci para valorar tales experiencias y extraer conclusiones desde la perspectiva de la democracia plena. Obtenemos de todo ello una innovadora aportación a la teoría y la práctica política que podría contribuir al avance en la formulación de estrategias políticas orientadas al desarrollo de sistemas democráticos verdaderamente participativos, en el marco de un nuevo modelo de sociedad fundamentado en los principios de la autoemancipación política.

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